CROCHETERAS ON THE ROAD
¿Quién de l@s presentes sueña en cada viaje con que le toque ser copiloto? ¿Para qué? ¡¡Para crochetear!!
Y es que desde que crocheteamos, los viajes son mucho más viajes
En estos tiempo que corren, para nosotr@s, viajar es la excusa perfecta para pasar horas y horas crocheteando sin que nadie nos moleste o tengamos la obligación de realizar cualquier otra actividad.
Ponte en situación. Tú, tu bolsa con el proyecto y el escaso metro cuadrado que te pertenece ¡¡Venga, hombre!! ¡¡Que nos las venga a dar todas!! Nos gusta más un asiento de copiloto que a una madre o un padre una piruleta. Porque no os dejéis engañar cuando los veis comprando chuches para sus hij@s, no son para los enan@s.
¿Nos gustan los viajes de cinco horas en tren? ¡Sí!. ¿Las escalas de tres horas en el aeropuerto? ¡Sí!. ¿Las esperas de los autobuses? ¡Sí!… Si es que siempre he dicho que estamos cortadas por el mismo patrón y, desde que le damos a la agujita, hemos aprendido a disfrutar de los pequeños placeres que nos ofrece la vida.
¿Odiamos los autobuses y el metro lleno hasta las manillas? ¡¡Pues claro!! Así un@ cómo se va a sentar en los asientos libres y le va a dar rienda suelta a su super poder.
Mi copiloto
Desde que tengo el placer de tejer soy la copiloto perfecta ¡¡Ya no me duermo!!
Es por esa razón que estaba deseando crear un hashtag que me ayudase a haceros llegar mi vivencia. Gracias a las bonitas de Patricia y Natalia de Bluebubalu, y un stories en el que me nombraron, se me ocurrió la idea de «Tu hashtag, tu entrada». De ésta forma podía invitarlas a pasar un día virtual en mi blog. #CrocheteraOnTheRoad fue la idea que me propusieron.
#CrocheterasOnTheRoad
(Natalia y Patricia)
Años 90. De viaje en coche…
-Yo: ¿Falta mucho?
-Mamá: queda un rato
…….5 minutos después…
-Yo: ¿Falta mucho?
-Mamá: queda un rato
……30 minutos después…
-Yo: ¿Falta mucho?
-Mamá: queda un rato
……5 horas después…)
-Yo: ¿Falta mucho?
-Mamá: Ya hemos llegado!!!
Año 2017. De viaje en coche…
Mamá: Cariño, bonita (con tonito…) ¿falta mucho?
Natalia: una vuelta más y salgo del coche
Y es que desde que descubrí esto del crochet, no hay ratito libre que tenga que no lo dedique a dar unos cuantos puntos más, quien dice puntos, dice vueltas o terminar la labor… Y qué mejor lugar y qué mejor situación que ir en un coche, donde lo único que tienes que hacer (si no conduces, claro) es leer… cantar… hablar… o crochetear!! Ouuuuuhh yeahhhhh!!
Siempre me ha llamado la atención el mundo de las manualidades y labores. Todo lo relacionado con la creatividad y el DIY era susceptible de convertirse en adicción para mi. Hasta que descubrí el crochet, que aúna ser una actividad manual, muy creativa que requiere concentración, con que se puede llevar a cualquier sitio ocupando muy poco espacio, lo que es una ventaja to-taaaaaal para dejarse llevar por la adicción. Ésta última es la gran diferencia con otro tipo de labores.
Ya no quiero conducir, ni aunque me ofrezcan el auténtico Batmovil. Ahora sólo quiero ir de copiloto o incluso en el asiento de atrás. Es verdad, que al principio puede marear un poco. Pero, por lo menos en mi caso, el ansía viva de terminar la labor es la mejor biodramina. Estoy segura de que no soy la única y, desde luego, me considero una de tantas #crocheterasontheroad repartidas por el mundo.
Pero ¡cuidado! No sólo eres una#CrocheteraOnTheRoad si vas crocheteando en el coche, ¡no! También lo eres si sacas tu ganchillo en el tren, en el metro, en el avión… Vamos, que si buscas cualquier desplazamiento, por corto que sea, para ganchillear alegremente, amiga, tú eres de las nuestras. Una auténtica y genuina #CrocheteraOnTheRoad
(Fin de la cita :P)
La copiloto Perfecta
Pues eso amig@s, que tal y como nos cuentan Patricia y Natalia, #CrocheteraOnTheRoad l@s hay de todas las clases y de todos los estilos. A algun@s, nos marea un poco crochetear en el coche y preferimos hacerlo cuando salimos a descansar las piernas. A otr@s, nos sube la adrenalina cuando somos capaces de pasar nuestras agujas y enseres por el control del aeropuerto. Y a otr@s poc@s, nos flipa creernos estrellas de rock crocheteando en una caravana, de carretera en carretera, y ahogando nuestras vivencias en gasolina.
Sí señores, somos así y no podemos evitarlo. Ahora, una cosa debe de tener claro tod@ aquel que nos haga de pilot@
¡¡Somos l@s copilot@s perfect@s!!
¿Sueño? ¿nosotr@s? ¡¡Nunca!! Siempre hay una vuelta más que dar. Siempre estaremos pendientes de que no les falte de nada. Aunque deben esperar a que terminemos la vuelta. Que ¿qué?, ¿Hablar? Pero si me toca contar ¿No te hace feliz que vaya a tu ladito?
Seguro que somos much@s l@s #CrocheteraOnTheRoad que nos pasamos la vida «travelando». Así que, ¿Qué te parece si jugamos y nos lo contamos por instagram? Allí podremos postear fotos para que tod@s lo veamos con el hashtag #CrocheteraOnTheRoad, o Stories, que nos hagan seguirnos la pista.
¡¡Lo vamos a pasar genial!!
¿Y tú? ¿Eres un@ #CrocheteraOnTheRoad y amas hacer kilómetros como si no hubiera un mañana? Estaré encantada de leer tus experiencias en los comentarios y, además, podréis saludar a las bonitas de Natalia Patricia que lo ha hecho de maravilla. Gracias amigas por ser tan atrevidas y divertidas.
Me ha encantado el postre, refleja exacto lo que es ir crocheteando de copiloto, yo por eso ni carro quiero tener, en el bus voy contenta dándole a la aguja todos los días ida y vuelta, la verdad es de lo mejor, ya ni siento el viaje, cuando acuerdo debo guardar a toda prisa mi proyecto porque ya me toca bajar hahahaha la gente se me queda viendo cuando guardo como loca todo. A principios de este año empecé a sacar mis lanitas en el bus por lo que te dije que me quedaba dormida y no queria, al principio notaba las miradas y me incomodaba un poco porque soy algo introvertida y me molestaba si me hacían preguntas sobre lo que hacia, pero ahora tienen que quedarse viendo mucho rato para que lo note 😅 y me agrada haber vencido aunque sea un poco con el crochet mi introversion ahora no me importa tanto si me preguntan, y aunque aun me cuesta expresarme con soltura ante extraños ahora respondo más relajada y no más que no se alargue la platica porque pierdo la contada Hahahahaha y así ya no juego 😂 ya veras mis fotos por ahí en los stories parece que solo empezando nuevas cosas ando 😂😂😂😂
Hola Gladys!! A mí al principio también me daba mi vergüenza, pero es verdad que yo estaba muy acostumbrada antes a sacar mis libros y ponerme a leer, desde bien pequeña. Entonces cuando empecé con el crochet y desplazó, a veces hasta por completo, mi lectura, me dije a mí misma: Pero si al fin y al cabo el lo mismo.
Creo que poco a poco la sociedad vuelve normalizar este tipo de situaciones porque yo cada vez recibo menos preguntas cuando me pongo. A lo mejor puede ser por lo mismo que tu comentas. Estoy tan metida en mi labor que ni siquiera me doy cuenta de que me miran o si les apetece preguntarme para atenderlos.
Me alegro muchísimo de que superases tu vergüenza. A veces, deseamos hacer cosas que por vergüenza no hacemos y eso nos puede frustrar. El haber superado tu timidez en este aspecto, estoy segura de que te ha beneficiado en tu persona. Me alegro muchísimo por ti. Un beso enormeee!!!
Hola Ali!!!
Aquí una #CrocheteraOnTheRoad incluso cuando el metro va hasta arriba y me toca ir de pie, y si estoy a punto de acabar la labor, mientras voy andando desde el metro a la puerta del colegio a recoger a la pequeña, es ideal para sacarlo en el parque, en el cuenta cuentos… De ahí que aunque el gusanillo empezó por las dos agujas no he conseguido aprender (este año voy a por ello si o si) el ganchillo también me llamaba y me compre el curso de Amigurimi de Wasel Wasel, Gemma es un amor… y lo dejé un tiempo aparcado hasta que nació la niña y tuvo dos «temporadas» de 10-15 días de levantarse ella (y mamá por supuesto) a las 4:30-5:30 de la madrugada y que hace una madre a esas horas para mantenerse despierta? ver videos de ganchillo en la 1ª temporada y practicar en la 2ª y ahora pues mamá se lleva la labor a todos sitios… jajajajaja
Y si la Cuenta Cuentos le da tos en mitad del cuento, Mamá le pasa un caramelito con una mano que la otra la tiene en la labor… que una avalancha de gente sube por las escaleras del metro… mamá se aparta y sigue a su labor, Mamá se ha vuelto loca jajajajajaja
Vaya rollo te he soltado guapa, mi próximo proyecto tu Baby Montain del Bundle Hygges y seguro que es un «empezar y no parar» jajajajajaja
Yo no es por nada pero la mamá mola mogollón. Me has enamorado con todo lo que me has contado, porque ésta es la razón por la que día a día posteo y os cuento las cosas que se me ocurren. Cuando empecé con el ganchillo, durante mucho tiempo no conocía a nadie y no podía compartir mis dudas, experiencias y logros. Ahora nos contamos y nos sentimos iguales ¡¡Es una forma preciosa de hacer que nos valoremos!! Te agradezco muchísimo que me hayas contado un poquito más de ti y que así pueda conocerte mejor. Gracias por leernos. Un beso enormeeee
Por cierto, yo estoy deseando empezar el curso de calcetines de Gema ¡¡Tengo un kit en camino y sé que con sus nociones lo voy a conseguir prontísimo!!
Un besoooo
Jajaja..me parto!!
Así somos las crocheteras y tejedoras en general!
Antes me tocaba la mitad del viaje de piloto pero desde que me dedico a tejer de forma profesional, mi piloto dice que son horas de producción y yo, obviamente, me sacrifico 😉
Qué satisfacción da cuando un viaje al terruño se convierte en una labor terminada! 4 hititas que mañana aprovecharé de lo lindo!
#crocheterasontheroad power!
😘😘
¿Las aprovechaste, amiga? Que suerte tenemos con nuestros pilotos jejejej Yo conduzco todos los días durante dos horas y nos vamos de vacaciones, tanto mi pareja como mis amig@s, siempre me dejan ir de copiloto. Yo me encargo de que no les falte de nada, eso sí jajajaja
¿Y cuando terminamos una labor? A veces, somos tan ansias que nos preguntamos por qué dejamos los otros ovillos en el maletero jajaj Y empiezan los sudores fríos de quiero parar para cogerlos jajajaja A ti te pasa?
Un beso enorme, preciosa ¡¡Me encantó tu comentario!!